Ante un verano que promete ser decisivo, la Real Sociedad se encuentra en una encrucijada: decidir si apostar por su reconocida cantera o invertir en fichajes con experiencia. El traspaso inminente de Martín Zubimendi al Arsenal dejará más de 60 millones de euros, una cifra clave para diseñar la próxima temporada bajo la nueva dirección deportiva de Erik Bretos y el entrenador Sergio Francisco.
Dinero fresco y estrategia de fichajes
La venta de Zubimendi supondrá un ingreso cercano a los 66 millones, lo que proporcionará margen para reforzar la plantilla en múltiples líneas sin comprometer la salud financiera. Esto permitirá combinar inversiones selectivas con el desarrollo de talento propio, un rasgo distintivo del modelo donostiarra.
Tres prioridades para competir
El club se ha fijado tres objetivos concretos para este mercado:
- Defender con solvencia: tramitar la incorporación de un central de garantías (exigencia prioritaria), tras la marcha segura de Nayef Aguerd, cuya cesión no se renovará.
- Potenciar el ataque: buscar un delantero centro que alivie a Oyarzabal y aporte gol, perfil similar al de perfiles contrastados como Budimir.
- Apoyar la cantera: dar oportunidades reales a jóvenes como Jon Gorrotxategi, Urko González de Zárate o Jon Martín, integrándolos progresivamente en el primer equipo.
Este enfoque híbrido refleja la necesidad de reforzar áreas clave sin erosionar la estructura financiera, apostando por pocos fichajes, pero efectivos y equilibrados.
Cambios en estructura deportiva y plantilla
Con la marcha de Imanol Alguacil y la entrada de Sergio Francisco y Bretos, se inicia un nuevo ciclo. Se espera un proceso de recorte salarial, con salidas previstas de jugadores con contrato en vigor, como Hamari Traoré, Artiz Elustondo o Scherhado Becker. Esto liberará espacio para incorporar perfiles más jóvenes o adaptados al nuevo proyecto.
El Sanse, filial integrado en la estructura, será esencial como semillero, facilitando una transición natural de canteranos al primer equipo.
Juventud y veteranos: la mezcla precisa
El club ya invirtió más de 57 millones en jóvenes promesas como Zakharyan, Sucic u Oskarsson en temporadas anteriores, y espera ahora que den un paso adelante. El ingreso por Zubimendi permitirá reforzar sin descuidar el futuro, manteniendo una plantilla competitiva y con estabilidad.
Riesgos y oportunidades
El principal desafío será encontrar la combinación adecuada: no fichar por fichar, sino incorporar talento con impacto inmediato. La directiva, consciente del potencial del modelo, subraya que habrá pocos fichajes, pero todos enfocados y de calidad.
El reto es mayúsculo: competir en LaLiga y regresar a Europa requiere inteligencia en el mercado, dosis de cantera y capacidad de ejecución. La Real Sociedad tiene el capital económico y deportivo para lograrlo.