El Comité Olímpico Internacional (COI) ha dado un paso firme hacia la consolidación del deporte como herramienta para la transformación social. Entre el 3 y el 5 de junio, la ciudad suiza de Lausana acogió la cumbre “Olympism365 Summit: Sport for a Better World”, un encuentro que reunió a líderes globales, organizaciones deportivas, entidades gubernamentales y ONG con un objetivo común: alinear el olimpismo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Un evento histórico con impacto global
Durante tres días, más de 68 organizaciones internacionales y representantes de 45 compromisos estratégicos se dieron cita en la sede olímpica. El resultado: una hoja de ruta que prevé movilizar 200 millones de dólares en inversión social durante los próximos cuatro años. Este capital se destinará a proyectos que utilicen el deporte para generar inclusión, igualdad y resiliencia en comunidades vulnerables.
La presidenta del COI, Kirsty Coventry, subrayó la trascendencia del encuentro:
“El olimpismo no es solo competencia; es una fuerza capaz de transformar vidas y ofrecer esperanza. Nuestro reto es pasar del discurso a la acción con resultados medibles”.
Cuatro pilares de acción para los ODS
El plan de trabajo de Olympism365 se estructura en torno a cuatro áreas prioritarias:
- Educación y empoderamiento juvenil: programas para integrar la práctica deportiva en escuelas y comunidades.
- Igualdad de género y diversidad: acciones para incrementar la participación femenina en todos los niveles del deporte.
- Salud y bienestar: proyectos para combatir el sedentarismo, la obesidad y los riesgos asociados al deporte de alto rendimiento.
- Sostenibilidad y medio ambiente: iniciativas para reducir la huella ecológica de eventos deportivos e impulsar infraestructuras verdes.
Nuevas herramientas para la protección de los atletas
Uno de los anuncios más relevantes de la cumbre fue la implementación de protocolos unificados para prevenir abusos y proteger la salud mental y física de los deportistas. Estos incluirán sistemas de denuncia segura, asesoramiento psicológico y auditorías independientes en federaciones y comités nacionales.
Además, se presentó una plataforma digital para medir en tiempo real el impacto social de los proyectos asociados a Olympism365, garantizando transparencia y seguimiento.
Un compromiso que trasciende el deporte
La reunión de Lausana no se limitó a promesas: estableció indicadores concretos y una alianza inédita entre el COI, Naciones Unidas, empresas privadas y organismos sin ánimo de lucro. La meta es que, para 2030, el movimiento olímpico no solo organice los Juegos, sino que sea un catalizador global para la igualdad, la salud y la sostenibilidad.