Durante más de una década, la Red Bull X-Alps ha sido sinónimo de superación, resistencia y aventura extrema. Considerada la competición más exigente del planeta en su género, combina el vuelo en parapente con el trekking de alta montaña a través de los Alpes europeos. En su edición de 2025, un nuevo nombre se inscribe con letras de oro en su historia: el italiano Aaron Durogati, quien ha logrado destronar al ocho veces campeón suizo Christian Maurer y coronarse en una carrera marcada por la dureza del recorrido y la emoción hasta el último kilómetro.
Un desafío sobrehumano
La Red Bull X-Alps no es una competición convencional. Durante más de diez días, los atletas deben completar un trayecto de 1.283 kilómetros a lo largo de los Alpes, atravesando cinco países —Austria, Alemania, Suiza, Italia y Francia— únicamente a pie o volando en parapente. Los participantes cargan todo su equipo en mochilas de hasta 10 kg, y enfrentan desniveles de más de 50.000 metros acumulados. Es un test físico y mental que exige estrategia, resistencia, intuición climática y, sobre todo, una conexión total con la montaña.
En esta edición, el recorrido fue el más extenso de la historia del evento, lo que añadió un extra de dificultad a una prueba ya de por sí legendaria. La meteorología caprichosa, los tramos a pie por senderos rocosos, la presión del cronómetro y la necesidad constante de evaluar el viento para volar en condiciones seguras pusieron a prueba incluso a los más veteranos.
El ascenso de Durogati
Aaron Durogati, oriundo del Tirol del Sur, no es un desconocido en el circuito. A sus 38 años, combina una trayectoria brillante en el mundo del parapente —es campeón del mundo de acrobacias y vuelo cross country— con una pasión por la montaña que lo ha llevado a correr maratones alpinas y esquí de montaña. En las anteriores ediciones de la X-Alps había rozado el podio, pero fue en 2025 cuando todo encajó: condición física óptima, decisiones acertadas de vuelo y un ritmo de marcha constante.
Durogati lideró la carrera desde el segundo día, pero fue durante los cruces por el macizo del Mont Blanc donde consolidó su ventaja. Supo aprovechar las ventanas de vuelo cuando otros competidores debieron caminar, y resistió las largas noches de descanso mínimo gracias a una preparación meticulosa y a su fortaleza psicológica. Cruzó la línea de meta en Zell am See, Austria, con una mezcla de euforia y agotamiento, abrazado por su equipo de apoyo y una comunidad que lo reconoce como un referente.
El fin de una era
Además del triunfo de Durogati, esta edición será recordada por el fin del dominio de Christian Maurer, apodado “Chrigel the Eagle”. El suizo, múltiple campeón, no pudo completar el recorrido debido a una lesión en el tobillo que arrastraba desde el entrenamiento previo. Su ausencia en los puestos de vanguardia marcó un cambio generacional y abre una nueva etapa en la historia de la competición.
Otros destacados fueron el francés Damien Lacaze, quien terminó segundo tras una espectacular remontada en la última etapa, y el austríaco Paul Guschlbauer, eterno animador de la carrera, que volvió a firmar una actuación sólida con un tercer puesto muy celebrado en casa.
Más que una carrera
La Red Bull X-Alps es mucho más que una prueba de velocidad. Es una odisea donde los atletas deben leer el paisaje, anticipar tormentas, ahorrar energía y luchar contra el agotamiento físico y emocional. No hay premios millonarios ni grandes patrocinios, pero sí un profundo respeto por quienes se atreven a recorrer los Alpes con la sola ayuda de sus piernas y sus alas.
Para muchos, este evento representa la esencia del deporte extremo: la búsqueda de los límites humanos en un entorno natural majestuoso y hostil a la vez. En tiempos de competiciones cada vez más mediáticas y tecnificadas, la X-Alps conserva un espíritu puro y auténtico que la hace única.
El legado de 2025
Con esta victoria, Aaron Durogati no solo inscribe su nombre en la historia de la carrera, sino que encarna la figura del atleta total: resistente, técnico, humilde y apasionado. Su triunfo es también un tributo a la paciencia, al trabajo silencioso y a la perseverancia frente a la adversidad.
La edición 2025 de la Red Bull X-Alps será recordada como un punto de inflexión. Por el nivel de los participantes, por la extensión del recorrido, por la despedida simbólica de una leyenda y por la consagración de un nuevo campeón. Un año inolvidable para una carrera inolvidable.